2 de enero de 2009

CONSULTORIO DE ESTELLE PARA JÓVENES DISFÁGICOS IV

Queridos disfágicos, vuelvo en este recién estrenado 2009, como una uva regurgitada entre campanadas, para felicitaros la entrada del año. Espero que este nuevo año ponga un poco las cosas en su sitio. Vamos, que lo organice todo como una caja de galletas Cuétara, en pisitos y con sus obligados departamentos: los zascandiles con los botarates, los viceberzas con los berzas, los culichichis con los lameculos de toda la vida, los adefesios con los cayos malayos y así sucesivamente. A ver si de este modo, podemos evitar tener que cruzar lindezas con dichos mentecatos-metomentodo-correveidiles insufribles. 
Ea!! Dicho esto voy a pasar a responder a la Atenea juega a Paddle, que preguntaba por qué en invierno se impone el negro. A ver alma de cándido, te daré varias respuestas, porque viendo el comentario que dejaste, creo que con una no tendrás suficiente.
En primer lugar, se trata de un complot entre mi amiga Agatha y yo, con el beneplacito de San Corte Inglés, para monopolizar los colores en las épocas grises de invierno. Hala, ahí lo tienes ya podéis hablar de algo que no sea la crisis. 
En segundo lugar, hay que decir que durante el invierno, las horas de luz son menos y hace más frío. Por eso aumentan las visitas a los dentistas. ¿A los dentistas? ¿Pero que dice esta vieja resbalaneuronas? Vestimos de negro para que resalten nuestros dientes. La única parte de nuestro cuerpo que muestra nuestro estado de salud y nuestro estatus económico. Así que no gastéis vuestros ahorros yendo al gimnasio, papanatas de bicicleta estática, gastaos la pasta en el dentista.

Y en tercer lugar y para terminar, voy a arremangarme para poderme explayar a gusto. Podría decirte, en un sentido más existencial, que como muertos en vida vestimos de negro para lamentar el fin de nuestra propia existencia. Entendiéndonos como seres mediterráneos de clima soleado, que mueren con la llegada del invierno. Pero, no. La razón es otra. Dado que no podemos aletargarnos como animales de montaña. Tenemos que inventar o construir una alternativa cultural, debido a nuestra desvinculación con la naturaleza. ¿Cuál es el color esencial del letargo? El negro. Por eso las vestimentas negras en invierno, pueden simbolizar un letargo generalizado. Para la próxima temporada, quizás sería mejor vestir de colores y colgarnos un cartelito en la espalda que rece tal que así: "En letargo. No molestar hasta abril".
Hala pues, espero que alguna de estas respuestas te haya dejado satisfecha. Si no, siempre te quedará la wiskipedia. Y con esto y un bizcocho, ya se ha pasado el 2008. Un abrazo disfágicos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muchas gracias, querida Estelle, por aclarar mis dudas cromático-existenciales. En días soleados como hoy creo que debería imponerse el mostaza como nuevo negro, así pareceríamos todos de Dijon y hablaríamos con asentóó fgancéés... me oui!
Ya que estás en los cielos, dale un beso a Paul Newman, que te tendrá contenta... Y un pellizco a Billy Wilder!
Atenea juega a Palas